Me llamo Flor, durante años he colaborado con la Asociación Puente de Esperanza en la ciudad de Madrid.
Ahora vivo en Madagascar y sigo en contacto con la Asociación a través de los cursos de español en línea. Tengo dos alumnas malgaches: Cécile y Tatiana. Ellas nos cuentan su experiencia como alumnas de español:
"Estamos muy contentas de ser las primeras alumnas malgaches que estudian español a través de Puente de Esperanza desde nuestro propio país. Vivimos en una zona rural de la región de Itasy y los cursos nos abren a otra cultura muy diferente y muy lejana.
Nos gusta hacer los ejercicios y cada día aprendemos cosas nuevas."